Pulsar significa tocar, acariciar y explorar. Para los más peques de la familia, la compañía usará bloques de madera para crear un paisaje en constante cambio que se mueve, crece, se alza y crea música. Mientras la audiencia, sentada alrededor del paisaje, consigue crear un espacio común seguro y propio.
Este espectáculo propone una dramaturgia de acciones e imágenes en la que los artistas, jugando con elementos simples, convocan a los espectadores a una experiencia placentera, sutil, suave y amigable a través del tacto.